domingo, junio 26, 2011

La culpa es de los Pittsburgh Pirates


¿Sabéis a quién culpo? A los Pittsburgh Pirates porque en 1947 descubrieron a una promesa de pitcher llamado Fidel Castro, de Alta Habana, muy rápido y con una buena curva pero, en el último minuto, los equipos retiraron sus ofertas.

Pensadlo: ¿Y si hubieran cogido a Fidel, eh? Ni Bahía de Cochinos, ni asesinato de Kennedy, ni tapaderas, ni Vietnam, ni Nixon, ni Ford, ni pantalones de campana, ni La Tribu de los Brady, ni chanclas, ni Reagan, ni crack. No, todos comeríais perritos, tarta de manzana y fumaríamos habanos.

Denis Leary en una escena eliminada de Asesinos Natos



Cositas que me gustan:

"Fuerte
me entran ganas de cogerte
y darte lo que te mereces,
eso y más,
me entran ganas de cogerte
y darte lo que te mereces,
y darte todo y más."

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Expulsa tu comentario aquí: